Estando en un restaurante de comida italiana, en una pequeña mesa compartiendo nuestros platos de pasta y pizza, sonó la alarma de incendios. El restaurante enmudeció de pronto, aunque algunos críos aun seguían dando el follón y el hilo musical seguía sonando con agradable música que ahora nadie le prestaba atención.
Nosotros veíamos el pasillo que daba a la cocina y esperábamos ver el humo o incluso el fuego o su resplandor. Una camarera se acercó a la cocina para saber qué pasaba y al rato salió sin muchas prisas. Unos segundos más tarde la alarma se apagó y todo volvió a la normalidad.
Lo que me llamó la atención es que los aspersores no se pusieran en marcha. Aunque para esta ocasión lo preferí, de lo contrario nos hubiesen dejado empapados y sin comida.
Cocineros del mundo, tengan cuidado con los flambeados 🙂 .
Uy, ¿y con quién estabas? xDD
¡Besitos!
Lo importante es que salí sano y salvo…y sin traumas con la comida italiana xD
Seguro
Eso, eso, queremos saber con quién estabas compartiendo la comida en una mesa pequeña 😀
Sabía que debía haber contado cómo el cocinero salió prendido en llamas mientras un sicario de la mafia italiana lo perseguía con un cuchillo, hubiese desviado mejor la atención xD
¡Ese comentario no es el mío!
@Jake : pues es el que dejaste.
Uy, yo sé de una interpretación incorrecta de los flambeados que dio lugar a un disgusto. Alguien escuchó «flan meado» jajaja y no digo más!
@Pausem : jajajaja, espero que no lo escuchase el camarero o_O