Hace no mucho tiempo leí en alguna web que los blog’s representan el ego de quienes lo escriben y que había en Internet herramientas para calcularlo (lo llaman egómetro). En parte hay algo de razón, pues un blog es escrito por una persona que quiere expresar su opinión al resto de seres vivos y eso no es más que una muestra de intentar estar presente en la vida de los demás, una forma de hacer que las personas giren a su alrededor leyendo sus opiniones.
¿Qué hay de malo en esto? No lo sé, depende de cómo se enfoque….es más no me importa. Sólo me importan los aspectos positivos de lo que hago y como pienso que escribir es una forma de desahogo muy útil…..blogear es bueno 🙂 . Lo angustioso del tema es cuando escribes y nadie te contesta….es como hablarle a una pared (de color amarilla que molesta más), esto puede llegar a ser contraproducente y generar ira, rabia, frustración, eyaculación precoz, etc 😉 .
Y es que hoy en día cualquiera puede tener un blog y eso es algo que satura Internet. Todo el mundo quiere bloguear…..pffff vaya rollo para los que empezamos. Lo que hace que triunfes en un blog es que hables de temas de actualidad de forma crítica, que tengas una buena tira cómica o que pongas fotos de mujeres con buenas prestaciones (con este último da igual que clase de web tengas 🙂 ).
La pregunta ahora es: «¿de qué narices está hablando? ¿a quién le importa?» En este punto volvemos al párrafo 2, donde lo único que busca el bloguer (aquel que escribe bitácoras) es ser leído y como el bloguer es un egocéntrico creerá que así lo hace la gente. Pero no será más que una pequeña mentira, pues aunque tenga 100 visitas diarias, todas estás serán gracias a que los buscadores hacen mal su trabajo y 99 personas habrán entrado por equivocación y cerrarán el blog sólo con ver la porquería que hay escrita. Y aunque puedas pensar que al menos a entrado un persona a propósito….no te confíes, esa persona es la dueña del blog 🙂 .
Pero bueno, hay que mantener la ilusión viva.
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